Podcasts by Category

Evangelio Católico del Día

Evangelio Católico del Día

Tabella

Escucha las lecturas diarias del Evangelio Católico del día de hoy. Estas lecturas son publicadas gracias a Tabella.

1527 - Viernes, 31 de mayo de 2024 | Lucas 1,39-56
0:00 / 0:00
1x
  • 1527 - Viernes, 31 de mayo de 2024 | Lucas 1,39-56

    En aquellos días, María se encaminó presurosa a un pueblo de las montañas de Judea y, entrando en la casa de Zacarías, saludó a Isabel. En cuanto ésta oyó el saludo de María, la creatura saltó en su seno.
    Entonces Isabel quedó llena del Espíritu Santo, y levantando la voz, exclamó: “¡Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre! ¿Quién soy yo para que la madre de mi Señor venga a verme? Apenas llegó tu saludo a mis oídos, el niño saltó de gozo en mi seno. Dichosa tú, que has creído, porque se cumplirá cuanto te fue anunciado de parte del Señor”.
    Entonces dijo María:
    “Mi alma glorifica al Señor
    y mi espíritu se llena de júbilo en Dios, mi salvador,
    porque puso sus ojos en la humildad de su esclava.
    Desde ahora me llamarán dichosa todas las generaciones,
    porque ha hecho en mí grandes cosas el que todo lo puede.
    Santo es su nombre
    y su misericordia llega de generación en generación
    a los que lo temen.
    Ha hecho sentir el poder de su brazo:
    dispersó a los de corazón altanero,
    destronó a los potentados
    y exaltó a los humildes.
    A los hambrientos los colmó de bienes
    y a los ricos los despidió sin nada.
    Acordándose de su misericordia,
    vino en ayuda de Israel, su siervo,
    como lo había prometido a nuestros padres,
    a Abraham y a su descendencia,
    para siempre”.
    María permaneció con Isabel unos tres meses, y luego regresó a su casa.

    Fri, 31 May 2024 - 02min
  • 1526 - Jueves, 30 de mayo de 2024 | Marcos 10,46-52

    En aquel tiempo, al salir Jesús de Jericó con sus discípulos y bastante gente, el ciego Bartimeo, el hijo de Timeo, estaba sentado al borde del camino, pidiendo limosna.
    Al oír que era Jesús Nazareno, empezó a gritar: «Hijo de David, Jesús, ten compasión de mí.»
    Muchos lo regañaban para que se callara. Pero él gritaba más: «Hijo de David, ten compasión de mí.»
    Jesús se detuvo y dijo: «Llamadlo.»
    Llamaron al ciego, diciéndole: «Ánimo, levántate, que te llama.»
    Soltó el manto, dio un salto y se acercó a Jesús.
    Jesús le dijo: «¿Qué quieres que haga por ti?»
    El ciego le contestó: «Maestro, que pueda ver.»
    Jesús le dijo: «Anda, tu fe te ha curado.»
    Y al momento recobró la vista y lo seguía por el camino.

    Thu, 30 May 2024 - 02min
  • 1525 - Miércoles, 29 de mayo de 2024 | Marcos 10,32-45

    Mientras iban de camino para subir a Jerusalén, Jesús se adelantaba a sus discípulos; ellos estaban asombrados y los que lo seguían tenían miedo. Entonces reunió nuevamente a los Doce y comenzó a decirles lo que le iba a suceder: “Ahora subimos a Jerusalén; allí el Hijo del hombre será entregado a los sumos sacerdotes y a los escribas. Lo condenarán a muerte y lo entregarán a los paganos: ellos se burlarán de Él, lo escupirán, lo azotarán y lo matarán. Y tres días después, resucitará”. Santiago y Juan, los hijos de Zebedeo, se acercaron a Jesús y le dijeron: “Maestro, queremos que nos concedas lo que te vamos a pedir”.
    Él les respondió: “¿Qué quieren que haga por ustedes?” Ellos le dijeron: “Concédenos sentarnos uno a tu derecha y el otro a tu izquierda, cuando estés en tu gloria”.
    Jesús les dijo: “¡No saben lo que piden! ¿Pueden beber el cáliz que Yo beberé y recibir el bautismo que Yo recibiré?” “Podemos”, le respondieron.
    Entonces Jesús agregó: “Ustedes beberán el cáliz que Yo beberé y recibirán el mismo bautismo que Yo. En cuanto a sentarse a mi derecha o a mi izquierda, no me toca a mí concederlo, sino que esos puestos son para quienes han sido destinados”.
    Los otros diez, que habían oído a Santiago y a Juan, se indignaron contra ellos. Jesús los llamó y les dijo: “Ustedes saben que aquéllos a quienes se considera gobernantes dominan a las naciones como si fueran sus dueños, y los poderosos les hacen sentir su autoridad. Entre ustedes no debe suceder así. Al contrario, el que quiera ser grande que se haga servidor de ustedes, y el que quiera ser el primero que se haga servidor de todos. Porque el mismo Hijo del hombre no vino para ser servido, sino para servir y dar su vida en rescate por una multitud”.

    Wed, 29 May 2024 - 03min
  • 1524 - Martes, 28 de mayo de 2024 | Marcos 10,28-31

    En aquel tiempo, Pedro le dijo a Jesús: "Señor, ya ves que nosotros lo hemos dejado todo para seguirte''.
    Jesús le respondió: "Yo les aseguro: Nadie que haya dejado casa, o hermanos o hermanas, o padre o madre, o hijos o tierras, por mí y por el Evangelio, dejará de recibir, en esta vida, el ciento por uno en casas, hermanos y hermanas, madres e hijos y tierras, junto con persecuciones, y en el otro mundo, la vida eterna. Y muchos que ahora son los primeros serán los últimos, y muchos que ahora son los últimos, serán los primeros".

    Tue, 28 May 2024 - 01min
  • 1523 - Lunes, 27 de mayo de 2024 | Marcos 10,17-27

    En aquel tiempo, cuando salía Jesús al camino, se le acercó corriendo un hombre, se arrodilló ante él y le preguntó: "Maestro bueno, ¿qué debo hacer para alcanzar la vida eterna?" Jesús le contestó: "¿Por qué me llamas bueno? Nadie es bueno sino sólo Dios. Ya sabes los mandamientos: No matarás, no cometerás adulterio, no robarás, no levantarás falso testimonio, no cometerás fraudes, honrarás a tu padre y a tu madre".
    Entonces él le contestó: "Maestro, todo eso lo he cumplido desde muy joven''. Jesús lo miró con amor y le dijo: "Sólo una cosa te falta: Ve y vende lo que tienes, da el dinero a los pobres y así tendrás un tesoro en los cielos. Después, ven y sígueme". Pero al oír estas palabras, el hombre se entristeció y se fue apesadumbrado, porque tenía muchos bienes.
    Jesús, mirando a su alrededor, dijo entonces a sus discípulos: "¡Qué difícil les va a ser a los ricos entrar en el Reino de Dios!" Los discípulos quedaron sorprendidos ante estas palabras; pero Jesús insistió: "Hijitos, ¡qué difícil es para los que confían en las riquezas, entrar en el Reino de Dios! Más fácil le es a un camello pasar por el ojo de una aguja, que a un rico entrar en el Reino de Dios".
    Ellos se asombraron todavía más y comentaban entre sí: "Entonces, ¿quién puede salvarse?" Jesús, mirándolos fijamente, les dijo: "Es imposible para los hombres, mas no para Dios. Para Dios todo es posible".

    Mon, 27 May 2024 - 02min
Show More Episodes